La intervención en esta vivienda ubicada en Lomas de la Cruz en Lo Barnechea, con un jardín aterrazado de 600 metros cuadrados y vistas impresionantes, ha sido una verdadera transformación que ha logrado integrar espacios de contemplación y descanso acordes con su entorno.

La incorporación de dos quinchos ha sido una parte clave de esta intervención, uno de los cuales ha sido excavado en el cerro e incorporado debajo de la vivienda, mientras que el segundo quincho se ha implementado en la terraza, generando dos espacios excepcionales. Además, los exteriores han sido transformados en un parque italiano, con arbustos y plantas aromáticas que rodean y aterrazan una piscina con bordes de mármol, creando un ambiente de serenidad y belleza natural.

El diseño ha optado por líneas simples y un exquisito piso de travertinos en la piscina, mientras que se han considerado plantas de poco consumo hídrico con riego automatizado, enfatizando la sustentabilidad y el cuidado del entorno.

La instalación de dos quinchos, uno en la piscina y otro en la terraza techada del segundo piso, ha brindado continuidad espacial a la vivienda, manteniendo la línea original de la casa y proporcionando una sensación de fluidez en todo el diseño.

Asimismo, la construcción de techos para el porche y la entrada ha contribuido a esta continuidad espacial, integrándolos como parte del diseño original de la vivienda. En resumen, la intervención en esta vivienda ha logrado crear espacios excepcionales de contemplación y descanso, integrando elementos arquitectónicos y paisajísticos que enriquecen la experiencia de disfrutar del hogar y su entorno natural.